Sólo una tierra como la de Cádiz, y más concretamente Sanlúcar de Barrameda y Bodegas Barbadillo, podía dar un vino semidulce tan amable y tan alegre, listo para tomar a cualquier hora del día o la noche.
El sol, onduladas colinas bañadas por los vientos cálidos de poniente y la suave brisa del Atlántico hacen posible un vino que se reinventa nuevamente gracias a tan singulares características y el esmero de una de las mejores bodegas españolas.
Elaborado exclusivamente con la variedad Palomino Fina, presenta 13º de graduación alcohólica, con brillante color amarillo pálido y reflejos verdosos. Es un vino de aromas delicados de flores blancas y frutas tiernas, muy fácil de beber, ideal para el maridaje con pescados, mariscos y comida japonesa. La temperatura ideal para disfrutarlo es entre 6º y 8º.
Su nombre proviene de los Caballeros Maestrantes, maestros en el arte de la jineta que fundaron en 1670 la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Ser maestrante supone, además de la estirpe nobiliaria, una situación personal, moral y cultural.
Un vino de categoría para gente con gusto por los buenos vinos.